LOS AUTENTICOS DECADENTES
03/05/2008 - El Teatro
Por: Sabrina Maite Rodríguez - cronicas@recis.com.ar
El CAD, pasión de multitudes
Los Auténticos Decadentes son un problema para cualquier cronista. Tratar de poner en palabras las sensaciones que el público experimenta durante un show de esta banda es una tarea tan difícil como tratar de explicar el fanatismo que siente un hombre por un equipo de futbol. Y posiblemente esta comparación sea la indicada, ya que el fervor y la locura que desparraman en cada show, tal como lo hicieron durante el recital que brindaron el pasado sábado 3 de mayo en el Teatro Roxy de Colegiales, sólo es equiparable a lo que una persona puede vivir un domingo en el estadio del club de sus amores.
Alrededor de las 8 de la noche, la reserva salió a la cancha. LOS RAMONOS, banda local homenaje a los Ramones, hicieron un set estridente que duró apenas 40 minutos. Detrás de sus distintivas y clásicas máscaras de monos, esta banda que hace música desde el plano de lo bizarro supo llegar al público y prepararlos para el verdadero show.
El Teatro estaba repleto y, tal como en un partido de fútbol, había gente de todo tipo. Jóvenes en la plenitud de su adolescencia, treintañeros nostálgicos de los 90`s, familias con niños, y hasta pendeviejos que salieron a divertirse un sábado por la noche. Todos aplaudían por igual para que este equipo que juega con 12 titulares saliera a la cancha. “Somos como somos, decadentes, así somos”, coreaba la popular, mientras que la gente del palco (a saber, la zona VIP del boliche) esperaba inmutada. La única que parecía ansiosa porque el show arrancara fue la barwoman del sector, quien más tarde bailaría y cantaría todos los temas de la banda subida a un banquito que había detrás de la barra.
Finalmente a las 9 y media de la noche, y tras 30 minutos de espera, se abrió el telón y la banda salió a escena. Sin uniforme oficial, el Club Auténtico Decadente dio el puntapié inicial con Somos. La popular estaba exaltada. Bailaba, saltaba, coreaba, tiraba papelitos. Era el principio de la fiesta. Durante los primeros minutos del arranque tocaron clásicos como “No Puedo”, “Cómo Me Voy A Olvidar” y “La Marca De La Gorra”, temas comandados por Cucho en la delantera. En la defensa, Eduardo Animal Trípodi y El Frances Bernardou dejaban de a ratos su lugar en la percusión para saltar y bailar por todo el escenario. Después de “Pendeviejo”, Jorge Serrano tomó la posta en el micrófono para cantar “Viviré Por Siempre”, “Corazón”, “Auténtica” y “Amanecer”. Mientras el equipo liderado por Serrano hacía vibrar a la hinchada, Cucho coordinaba junto con los asistentes de escenario y sonido que todo funcionase correctamente, lo que demuestra cuan bien cumple su rol como capitán tanto dentro como fuera de la cancha. Para cerrar la primera etapa, sonó “Los Piratas” y el delirio se apoderó del Teatro.
Durante el entre tiempo sonaron los últimos hits de la banda: “Veo” y “Otra Vez Lo Arruiné Todo”. Pero ya en la segunda mitad y ahora con Cucho engalanado en un traje completamente plateado, la banda volvió para entonar los ya míticos himnos decadentes. Sonaron “Besándote”, “El Jorobadito”, “Un Osito De Peluche De Taiwan”, “Sigue Tu Camino” y un excelente mix de “Raquel” y “El Murguero”. Con el tiempo suplementario ya cumplido, los doce jugadores volvieron al escenario para cerrar la noche con un alargue de tres canciones: “Siga El Baile”, “El Pájaro Vio El Cielo Y Se Voló” y el infaltable “Entregá el Marrón”.
Tras un partidazo musical de la banda, se cerró el telón y se prendieron las luces del lugar. El equipo había dejado todo en la cancha y el público lo agradeció con una ovación. Tarea cumplida, los 3 puntos son para el CAD y su gente.
Fotos: Marisol Pastorini (http://flickr.com/photos/marisolpastorini/ )
Mail del fotografo: cronicas@recis.com.ar
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